sábado, 4 de febrero de 2012

Pasión en el Maestranza

Volvió a pasar. Sevilla y Pasión Vega, una conjunción mágica. El Teatro de la Maestranza volvió a llenarse de pasión dos noches seguidas. Según algunas definiciones, el término "pasión" podría denominarse como aquel sentimiento arrebatador y explosivo que nos revienta en el alma. Y es que no hay unas palabras tan acordes con su personalidad como estas. Ya lo dijo una vez: "Si la gente me llama Pasión, por algo será". Y qué razón tiene. 

La ropa tendida en el escenario ya presagiaba un gran espectáculo. De repente, unas notas a piano empiezan a sonar, para dar paso a esa voz irrepetible que sabe como nadie promulgar el silencio absoluto en un teatro que hace apenas dos minutos era un jolgorio de voces y risas. Aquí esta de nuevo. Ella. Con Mirando al sur nos traslada a nuestra niñez, nos refleja cualquier pueblo de Andalucía donde correteamos por sus estrellas calles y sus empedrados suelos. Dejamos que la nostalgia y la emoción nos embargue en la primera canción. Y solo es la primera canción. 

Y ahora vuelve aquella María, esa misma María que se bebe las calles una a una, para dar paso a una interpretación sublime de Eso no es amar, donde Pasión canta ahora con una venda en los ojos y de espaldas al público. El amor es ciego, y así nos lo hace ella ver. Un amor que desgarra, que duele en lo más hondo, que nos hace pedazos, que nos lleva a la barra de cualquier bar para pedir un Bolero con Ron, porque los boleros con ron ya sabemos todos que duelen mucho menos.

Un escenario encima de otro escenario. Una clara metáfora de su grandeza. Y de nuevo le canta al amor, cómo no. Y viajamos a una Habana salerosa mientras Cádiz ya no tiene sentido porque aquella mulata no está, para la cual va dirigida la Habanera Postal más hermosa del mundo, quién sabe si escrita para alguna Niña Candela, de esas con el fuego en la cintura y una sonrisa que recordaba el levante.

Y ahora nos vamos a nuestros orígenes. Y es que la copla tiene otro sentido si ella la canta. Con qué desgarro canta Y sin embargo te quiero. Con qué dulzura y sentimiento nos deleita con los Ojos Verdes más famosos de nuestra historia. Con qué facilidad pone al público en pie para hacer que el Maestranza se llene de Lunares de un momento a otro, esos lunares, ni batas de colas, ni mantones, que no tienen sentido si su flamenquito, reencarnado en Eduardo Guerrero, bailarín de la compañía Eva La Yerbabuena no está. Y ahora se arranca y bailan los dos juntos. Y si no fuera poco, aparece Daniel Casares con su guitarra para acabar de volver loca a toda Sevilla. 

Y es que Pasión se atreve con todo, y por ello, hace que todo el mundo grite de alegría y asombro al oírla cantar Somewhere Over The Rainbow. Y en inglés. Ahí queda la cosa. Ya ves, noches como esta, son Cosas que hacen que la vida valga la pena. Como tú, Pasión. Como tú. 

1 comentario:

  1. Buenas noches. Yo estuve el Sábado, 28 en el Concierto de Pasión Vega. Como siempre todas mis expectativas se vieron colmadas. Y más allá. Cuál no sería mi sorpresa, cuando terminando el concierto Pasión Vega, al borde del escenario,y yo en primera fila, se para frente a mí, me hace un gesto con la mano. Pienso que no puede estar pasando. Me levanto,le cojo la mano, sigue cantando, le beso la mano. La miro y no me lo creo. Me vuelvo a mi asiento. Sigo sin creerlo. La gloria en mis manos. El mundo a mis pies. Feliz. Gracias Pasión Vega por tu música. Por tí.

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