Yo no sé si será este mes de septiembre caótico de entrega de trabajos, exámenes y exposiciones para acabar con las asignaturas del Máster o será que no tengo nada que contar interesante. O a lo mejor es que la inspiración se me ha ido y tengo que esperar a las musas.
La cuestión es que tengo mis blogs olvidados. Incluso había comenzado con el proyecto de uno sobre literatura. Y me pongo a pensar y es que verdaderamente no tengo vida. Mañana de estudio. Tarde de trabajo. Noche de sueño profundo. Y vuelta a empezar.
Solo espero que algún día, tanto esfuerzo, merezca la pena. Al menos para trabajar dignamente como periodista y no andar de niñera toda mi existencia.
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