Rosa.

Su pelo largo y rubio.

Sus ojos.

Su sonrisa de acero.

Tal vez sea su forma de hablar y la forma en la que me hace reír.

Tal vez seamos nosotras, con nuestras casualidades y diferencias.

La cuestión es que me sobran motivos para dedicarte un trocito de tiempo. 

Porque de repente, llegas, y lo alborotas todo. Y nadie es capaz de resistirse a tu brillo. Porque eres especial. Y lo que te hace única es esa fuerza que irradias por todos los poros de tu piel. Y nadie dijo que el camino es fácil. Y tú has tenido millones de complicaciones. Pero resulta que el destino, el cosmos, el karma, o como lo quieras llamar, es inteligente. O no, mejor dicho, la inteligente eres tú. Porque sabe que la suerte no existe. Que todo es puro trabajo. Y que se puede llegar a donde sea si quieres. 

Y eso me enseñaste tú. 

Porque eres una razón para muchos y un ejemplo para todos. 

Eres un corazón grande rodeado de corazones diminutos que no te merecen. 

Tú. La que decidió un día ser valiente y labrarse su propia vida sola. 

La que día a día sabe lo que es la palabra "amor" y lo grita a los cuatro vientos. 

No te preocupes si a veces hay momentos complicados en la vida. Esto es así.

La vida. Esa misma que pasa sin avisar. La que a veces parece que no avance y se quede quieta mientras duele.

Pero solo tú sabes de qué va el juego. Y sabes que la única razón es seguir sin rendirse. Pero yo también sé que la única razón es verte reír y cómo haces reír a los demás, la forma en la que transmites optimismo y ganas de ayudar, y a la vez, la forma en la que transmites tanta envidia. Porque la vida, además, está llena de envidiosos, pero eso lo sabes tú de sobra. 

No te canses nunca de vivir. Y acuérdate siempre de todos nuestros momentos. De las horas interminables con el móvil, de las risas sin sentido, de los frapuccinos antes de ganarle la batalla al inglés. De esa forma tan nuestra de hacer el tonto y de todos los momentos que nos quedan.

Podrás tener días malos y días buenos, pero no te olvides que tienes un corazón demasiado grande para esta ciudad tan pequeña.

Porque eres de verdad, de las que quieren, y consiguen. De las de "yo no me rindo". De las que no se olvidan.

Gracias por estar ahí. Siempre. Y escucharme cuando a veces, son solo tonterías.

Te quiero.

Really.